José María Gutiérrez, más conocido en el mundo del fútbol como Guti, fue un gran jugador en el Real Madrid. Compartió vestuario con grandes estrellas durante su estancia de más de una década en el primer equipo blanco, y conoce como muy pocos del talento de aquella generación a la el mundo del más universal conoció como Los Galácticos, y que incluía a varios de los mejores jugadores del mundo.
Guti compartió vestuario con Raúl, Roberto Carlos, Zinedine Zidane, Luis Figo, Ronaldo Nazario -El Fenómeno-, Michael Owen y David Beckham, entre algunos otros que visitieron la elástica blanca a principios del siglo, y que daba gusto verlos jugar, aunque todos, incluso Guti, coinciden en que debieron ganar más títulos, sobre todo cuando ya tenían en nómina a Ronaldo, Owen y Beckham.
Cuando se habla sobre los Galácticos y las causas por las cuales no ganaron más títulos, aunque alguno llegó, como aquella Copa de Europa ante el Bayer Leverkusen y el gol maravilloso de volea de Zidane, siempre se condiciona todo con la salida del centrocampista francés Claude Makelele, el hombre que le daba equilibrio a aquella partida de grandes jugadores que iban muy bien al ataque, pero que no regresaban a defender.
LAS DECLARACIONES DE GUTI SOBRE EL MADRID DE LOS GALÁCTICOS Y EL DE AHORA
Hace unas horas, en un show de televisión dedicado al fútbol, le preguntaron a Guti sobre el Real Madrid de Los Galácticos y el actual, y a cuál de ellos consideraba mejor. Y el centrocampista respondió sin dudar que el de ahora le parece mejor. Y de nuevo volvió a relucir el tema de Makelele, como el hombre que le daba equilibrio al equipo y que al final se marchó.
Para el ex jugador, el once actual, el que entrena Carlo Ancelotti, tiene tanto talento como aquel, y, a su vez, tiene a más jugadores con voluntad para sacrificarse en la defensa, algo que le falta a aquel que entrenó el portugués Carlos Queiroz y que parecía que nadie lo podía vencer. Y aunque Los Galácticos vivieron un espacio de tiempo que se pierde entre la llegada de Luis Figo y la salida de Ronaldo Nazario, es complicado comparar en el fútbol.
Aquel equipo, aunque tenía muchos jugadores de la base del Real Madrid, canteranos o españoles que hicieron carrera en el Bernabeu, estuvo marcado por los golpes de billetera que dio Florentino Pérez, al traer a cada uno de los jugadores que le apetecía, desde cualquier lugar, a veces al borde del mercado, como sucedió con El Fenómeno, que firmó en los últimos minutos del mercado de 2002, tras ganar el Mundial.
Ronaldo no se sacrificaba en defensa. Cuando llegó al Madrid ya venía lastrado por sus problemas de rodilla, y prefería reservar sus energía para ir al ataque y definir. Tampoco era muy de tirarse atrás Raúl González, quien veía que Ronny no lo hacía y no entendía por qué debía hacerlo él. Y Zizou, un prodigio técnico, apenas daba unos pasos atrás. El Madrid, entonces, necesitaba piernas fuertes y jugadores defensivos en el mediocampo.
Todo eso descompensó al Madrid. Ni Pablo Rodríguez, Ni Carlos Diogo, tampoco el danés Thomas Gravensen y mucho menos Mamadou Diarra resolvieron el problema, y el Madrid necesitó una década para poder pelear en igualdad de condiciones en Europa. Solo con la llegada de Ancelotti, ya con Casemiro haciendo de Makelele, pudo reinar de nuevo en la Champions.
¿QUÉ TIENE EL MADRID DE AHORA MEJOR QUE LOS GALÁCTICOS?
Por nombres, no hay comparación. Aquel de Zidane y Ronaldo era mejor. pero el fútbol va más allá de los nombres y los números en la espalda. Aquel era un Madrid de veteranos, con varios balones de oro en casa, pero era un equipo con escasa capacidad de sacrificio, todo lo contrario al actual, integrado por una mezcla de jóvenes con tremenda proyección como Vinicius, Bellingkam, Rodrigo, Brahim Díaz, Camavinga, Tchouaméni y Valverde.
El Madrid actual golpea adelante. Desequilibra con clase, aunque tal vez no cómo lo hacía Ronaldo, presiona en la salida del balón y recupera gracias a un mediocampo que controla todo, ya sea con Tchouaméni o con Camavinga, cualquiera de los dos con la misma habilidad de Makelele, como para hacer olvidar de una vez el nombre del mítico centrocampista francés.
Este Madrid, sin Bellingham y Tchouaméni, ganó una Champions, la decimocuarta del Real Madrid y su proceso de renovación ha ido paso a paso, tras la salida de las grandes estrellas de hace unos años, como Cristiano Ronaldo, Gareth Bale, Angel Di María o Karim Benzema, por citar solo a los más grandes.
Ahora mismo, a unos días de jugar los cuartos de Champions ante el Manchester City, el Madrid sigue siendo uno de los tres grandes de Europa. Puede caer en la eliminatoria ante el equipo de Pep Guardiola, que es otro de los grandes, pero eso no da ni quita. Es un gran equipo y favorito para ganarlo todo en los próximos años, sobre todo por lo que llegará en el próximo verano: Mbappé y Endrick, por ahora.
