Cuando Luis de la Fuente dejó fuera de la selección española para la Eurocopa a Pau Cubarsí, algunos pusieron el grito en el cielo y se cuestionaron al técnico, porque no podía ser posible que excluyera al defensa de más proyección en España para incluir, por ejemplo, a Nacho Fernández o a Vivian, sobre todo al primero que, salvo en los últimos partidos, había tenido un papel residual con el Real Madrid.
Al menos eso consideraban desde Barcelona, donde no se conformaban con la determinación del entrenador de excluir al emergente zaguero central, al que ya ponían como el próximo Franz Beckenbauer, algo así como mucho mejor que Gerard Piqué o Carles Puyol, las dos últimas grandes referencias en el centro de la defensa del equipo blaugrana durante la temporada anterior.
Cubarsí quedó relegado para los Juegos Olímpicos. Y De La Fuente le dio galones a Robin Le Normand, Aymeriq Laporte y Nacho Fernández en el centro de la zaga. Ocasionalmente se acordó de Vivian, y a la escuadra española no le hizo falta más para llevarse el título de la Eurocopa, con el mejor juego del torneo y con triunfo sobre los equipos más importantes.
El niño Pau Cubarsí me ha dejado dos pases que no puedo olvidar aunque me vaya a dormir. Porque desde Luis Pereira, Ronald Koeman, Beckenbauer o Gerard Piqué... yo llevaba tiempo sin ver algo que me dejase tan impresionado... Y el niño tiene 17 años. Va a ser grande en la selección española. Yo llevo tiempo sin ver tanta categoría
Y LLEGARON LOS JUEGOS OLÍMPICOS
El muchachito, al cual la prensa catalana y también alguna de otra parte de España, consideraba iba a ser puntal en la defensa española en los Juegos Olímpicos de París, cuyo torneo de fútbol se inició este miércoles, tres días antes de la inauguración oficial de la lid multideportiva en la capital francesa, apenas permaneció 45 minutos sobre la cancha y su actuación no puedo ser peor.
Un partido malo lo tiene cualquiera. Hasta las grandes estrellas consagradas sufren en algún momento, porque no están finos o porque los rivales a los que le corresponde marcar son muy complicados, pero lo cierto es que los primeros 45 minutos de Cubarsí en Francia 2024 pudieran ser los últimos, al extremo de que el seleccionador Santi Denia no lo dejó salir al descanso.
La salida de balón con él es brutal. Tiene la tranquilidad para generar jugadas de ataque, es un espectáculo verle. Cuando tiene la pelota, mis pulsaciones no suben. Estoy tranquilo. Juega con sentido. Es una maravilla. Es un chico muy racional. Estamos delante de una irrupción maravillosa para el Barcelona y el fútbol español
Cubarsí había sufrido en la mayor parte de las jugadas. Llegó tarde a varios balones. Se veía a simple vista que no estaba fino, pero llegó el minuto 44 con ventaja española de 1-0, gracias a un gol de Marc Pubill a la media hora de iniciado el choque con Uzbekistán. Los centroasiáticos se lanzaron contra el arco español para no irse al descanso abajo y sobrevino el penal de Cubarsí.
Fue una jugada enmarañada, con un balón suelto en el área al que nadie lograba despejar ni mandar a las redes, cuando sobrevino el agarrón del central del Fútbol Club Barcelona, que en un principio el árbitro no vio, pero que, con la ayuda del VAR, marcó penal. Instantes después los uzbecos, desde los 11 pasos, lograban la igualada. Y así se fueron ambos equipos a los banquillos.
Al salir para la segunda parte, el heredero de Franz Beckenbauer no salio. El técnico, consciente de que no estaba a la altura, decidió dejarlo en el banquillo y mandar en su lugar a Jon Pacheco. Con este, la defensa española se recompuso, los ibéricos consiguieron un gol y terminaron ganando en el debut por 2-1, lo cual los deja en una situación muy ventajosa para alcanzar la segunda ronda.
CUBARSÍ, FATI, RICKY PUIG... DECENAS MÁS
Pau Cubarsí tuvo un buen debut con el primer equipo del Barcelona. El chico aprovechó el mal momento del once culé y con un par de actuaciones sobresalientes se hizo de la titularidad. Luego, una vez asentado como fijo en el centro de la zaga, fue más prensa que otra cosa. Incluso, en la eliminación a manos del Paris Saint-Germain en la UEFA Champions League, no estuvo a la altura.
Los platos rotos, entonces, los pagó Ronald Aráujo por aquella tarjeta roja que dejó desguarnecido a su equipo en el partido de vuelta, pero no fue Cubarsí el jugador contundente en ninguna faceta, y mucho menos el zaguero sobrio, capaz de sacar la pelota desde atrás sin sobresaltos, como quisieron hacernos ver los voceros del once catalán nada más verlo emerger.
Su desempeño fue tan destacado que sus propios compañeros de equipo elogiaron su brillante rendimiento. Cancelo, por ejemplo, llegó a compararlo con Franz Beckenbauer y Araujo resaltó su habilidad para filtrar pases. El internacional uruguayo, de hecho, ya lo elogió hace unos días y destacó sus similitudes con Piqué
Es posible que Cubarsí no tenga muchas más opciones de reivindicarse con la selección sub-23 en los Juegos Olímpicos. En torneos tan cortos, los entrenadores no suelen dar segundas oportunidades, a menos que no tengan más opciones. Pero si se queda en el banquillo en los partidos restantes, puede ser un golpe duro para un chico que pudo haberse creído que ya había tocado la gloria.
No es la primera vez que pasa. A su también compañero en la selección y en el Barcelona Eric García lo pusieron por las nubes. Era otro Kaiser. Luis Enrique se lo llevó al Mundial de Qatar y luego se dio cuenta de que había sido un error y tuvo que improvisar con Rodri como zaguero central, una de las causas por las cuales quedó eliminada La Roja nada más salir de la fase de grupos.
De esos que la prensa y la directiva del Barcelona han puesto por las nubes y que luego han caído en picada ha habido muchos en los últimos años. Tantos, que la lista puede ser casi interminable, y todos, o la inmensa mayoría, salvo Gavi y Lamine Yamal, andan por ahí como jugadores de segunda fila, sin peso en sus respectivos clubes. Ojalá la prensa y los Juegos Olímpicos no le hayan hecho daño a Cubarsí.