El mundo del fútbol siempre deja noticias, sin importar que se estén desarrollando los Juegos Olímpicos, o que estemos en plena temporada baja, ese momento en el cual los técnicos ponen a tope a sus futbolistas y las directivas se esmeran en darle la mejor forma posible a sus plantillas, para las largas y extenuantes jornadas de las competiciones que vienen por delante.
Y el Barcelona siempre está en las portadas. A veces para bien, como sucede ahora con la casi inminente confirmación de Dani Olmo, el internacional español formado en la cantera blaugrana y que defendió hasta la temporada anterior los colores del RB Leipzig alemán, por el cual, se dice, Joan Laporta y su directiva pagaron cerca de 60 millones de euros.
El fichaje de Olmo, quien fue unos de los mejores jugadores de la selección española en la recién finalizada Eurocopa de Alemania 2024, saldada con el título continental, es la buena noticia para el club, el entrenador alemán Hansi Flick y para todos los aficionados, quienes se ilusionaron, sobre todo, con la posibilidad de que antes llegara Nico Williams, el prometedor mediapunta del Athletic Club de Bilbao.
Nico Williams es un gran jugador y ha hecho una gran Eurocopa. Es muy joven y tiene un margen de progresión importante. Todos los buenos jugadores al final queremos jugar con ellos. Al final no depende de mí. A ver qué hace el club y si se puede hacer o no, pero si se pudiera hacer claro que estaríamos encantados
EL MALOGRADO FICHAJE DE NICO WILLIAMS
En el Barcelona querían a Nico Williams. Se habló de él desde antes de comenzar la Eurocopa, porque al chico, de 21 años, se le ven modales de gran jugador, pero, sobre todo, porque su cláusula de rescisión, de unos 58 millones de euros, y sus poco más de seis millones de salario, estaban al alcance del club blaugrana, que no tiene dinero en sus arcas para enrolarse en otras aventuras.
Pero con el menor de los hermanos Williams le salió el tiro por la culata, por más que la directiva del Barcelona ´puso a trabajar a toda su maquinaria. Parecía que era imposible que el chico dijera que no iba a jugar a las órdenes de Flick, porque todos los medios cercanos al club daban por hecho el fichaje. Lo mismo hacían los influencers en las redes sociales cada día.
En estos momentos nos podemos permitir hacer un fichaje como el de Nico Williams. Creo que podremos hacer frente a un fichaje como el del jugador del Athletic. Es una de las posibilidades que estamos trabajando con Flick. Es un jugador que me gusta y mucho
Hubo quien se aventuró a decir que ya el Barça había llegado a un acuerdo con el delantero y que solo esperaba el momento de depositar la cláusula en La Liga para después presentarlo. Hubo hasta fechas en las tertulias deportivas, incluso declaraciones de Laporta, todo eso sin que se pronunciara ni una vez el jugador, que terminó la Eurocopa y luego se fue de vacaciones.
Mientras Williams no hablaba, los que fueron sus compañeros en la selección, lo hicieron por él. Por un lado, el barcelonista, Lamine Yamal, a quien supuestamente lo une una gran relación, daba esperanzas, le abría las puertas y se mostraba optimista. Por el otro, por el del Athletic Club, el también internacional Unai Simón, y el capitán rojiblanco, Óscar de Marcos, llamaban a la cordura.
Yo no pincho ni corto aquí, pero ojalá pudiera jugar con él
Al final, después de filtraciones, certezas, presiones, críticas y no sé cuántas cosas más, el jugador decidió quedarse en el equipo vasco, y no solo le dijo que no al Barcelona, sino también al Paris Saint-Germain, donde andan como locos en busca de un jugador con el cual suplir a su otrora gran estrella, Kylian Mbappé, quien llegó libre al Real Madrid en las últimas semanas.
OTRAS NOTICIAS MALAS
Si alguno pensó que la negativa definitiva de Nico Williams a vestir de blaugrana iba a ser la única noticia mala para el Barcelona, se equivocó. Lo del jugador del Athletic Club fue, tal vez, lo que más le dolió a la afición, pero hubo otras cosas que salieron a escena que dejaron mal parado al equipo catalán, entre ellas un informe de la Guardia Civil relacionado con el Caso Negreira.
La Guardia Civil encontró rastros de unos tres millones de euros en las cuentas de la esposa de José María Enríquez Negreira, sin motivo alguno para que hubieran llegado hasta allí, porque su salario como trabajadora de un bar no le reportaba tantos ingresos. Todo eso mientras Negreira se desempeñaba como vicepresidente del Comité Técnico Arbitral (CTA).
No ha quedado acreditado. El último informe de la Guardia Civil incorporado al sumario del caso Negreira, en el que se investiga los pagos millonarios del FC Barcelona al exvicepresidente Comité Técnicos Arbitral (CTA) José María Enríquez Negreira, concluye que “en este momento de la investigación” no hay pruebas de que los 7,5 millones de euros que las tres empresas vinculadas a este y su hijo, Javier Enríquez Romero, recibieron entre 2001-2018 “tuvieran como finalidad la realización de unos supuestos ‘asesoramientos’ en material arbitral
El Barça alegó en más de una ocasión que a Negreira se le pagaba por unos informes sobre los árbitros para el primer equipo, los cuales nunca se encontraron, a pesar de que algunos directivos dijeron que eran muy concisos, buenos y de gran utilidad. Incluso, entrenadores entrevistados, como Ernesto Valverde, que ahora trabaja para el Athletic Club, dijeron que nunca vieron informe alguno.
El Caso Negreira, que lleva más de un año y medio en investigación, tiene en el ojo del huracán al club blaugrana, porque, supuestamente, pago siete millones y medio de euros al ex vicepresidente del CTA por unos informes, aunque, en sus primeras declaraciones, el directivo de los jueces dijo que el pago se efectuaba para conseguir una supuesta "paridad" con el Real Madrid.
Luego del informe de la Guardia Civil, la Fiscalía Anticorrupción pidió al juez que lleva el caso que prorrogue por otros seis meses la investigación, porque necesita más tiempo para tomar declaraciones a los imputados, entre los cuales entran dos ex presidentes del Barcelona. El Real Madrid también es parte del pedido, con la intención de que hubo corrupción deportiva por parte de la entidad catalana.
