El argentino Jorge Valdano es un sabio del fútbol, un hombre que ha pasado por casi todas en el más universal: jugador, entrenador, director deportivo, comentarista, analista y una voz que siempre ha sido muy tomada en cuenta cuando al juego y a su entorno se refiere. Cuando Valdano habla, nadie queda indiferente, porque se ha caracterizado siempre por ser una persona en extremo juiciosa.
El campeón del mundo de México 1986, en aquel equipo que capitaneaba Diego Armando Maradona, dijo en una ocasión que "el fútbol es lo más importante entre las cosas menos importantes", como para dejar claro que después de la vida, la familia, los hijos, el trabajo, la salud, los amigos, el más universal tiene un peso importante en la vida de la gente, pero a veces los que dirigen la industria del balompié no siempre son tan empáticos.
En España, un temporal enorme, o una DANA, como lo llaman allí, arrasó una parte de la generalitad valenciana. Hay cientos de muertos y miles de desaparecidos, miles de familias que perdieron todos sus bienes, desde sus casas hasta sus vehículos, en medio de escenas dantescas que cada día se llena de miles de visualizaciones en las redes sociales, sin embargo, el fútbol no paró.
Quería mandar todo el ánimo y toda la solidaridad a todas las personas que se han visto damnificadas por este desastre, a todas las personas que han perdido seres queridos y me vais a permitir que especialmente tenga unas palabras hacia mi tierra, hacia Valencia, a todos los valencianos y todos aquellos que no lo son pero viven en Valencia, especialmente de la comarca de L'Horta Sud, en la que está entre todos los pueblos el mío, Massanassa
TEBAS NO PARÓ LA LIGA
La Liga Española tuvo una semana sin partidos intermedios, al menos para los equipos grandes y aunque muchas personas, incluso protagonistas, pidieron que la dirección del torneo nacional orientara parar cada uno de los partidos de la duodécima fecha, la jornada se jugó y solo se aplazaron los choques Villarreal versus Rayo Vallecano, en La Cerámica, y el Valencia contra el Real Madrid, en Mestalla.
Más allá de los resultados, de ganadores y perdedores, de goles, paradones, diferencias entre unos y otros en la tabla de posiciones, fue duro escuchar a jugadores y entrenadores, expresando su parecer sobre lo bueno que hubiera sido suspender la jornada y permitir que los jugadores pudieran ir a apoyar, a aportar, a trabajar allí donde tienen familias y amigos.
Lo siento si me emociono, pero todos tenemos amigos y conocidos que están ayudando allí. Hoy no era un día para celebrar nada, ni fútbol ni goles
Javier Tebas, el presidente de La Liga, el hombre que casi siempre critica la gestión de algunos presidentes, de algunos clubes, sobre todo de los que no se pliegan a sus designios, se opuso rotundamente a para la jornada. Incluso, dijo que lo ideal era seguir, jugar, llevarle un poco de alegría a la gente, pero la mayoría de los españoles no estaba para el fútbol, porque se dieron cuenta, como dijo Valdano, que no es de las cosas importantes.
No solo lo dijeron los habitantes humildes de Valencia, de los alrededores, el español común que se solidariza con el damnificado, sino jugadores, y técnicos, personas que salieron al ruedo a hacer su trabajo como profesionales, intentando olvidarse en algún momento de lo que pasaba allí, a cientos de kilómetros, donde aún hay gente desaparecida, familias sufriendo, padres que no encuentran a los hijos y viceversa.
Fue duro ver y escuchar a Pablo Fornals, el jugador del Real Betis, autor del gol que le permitió al equipo sevillano igualar 1-1 con el Athletic Club de Bilbao, romperse ante las cámaras. O también a Vicente Moreno, el entrenador avezado, quien admitió que no estaba en el juego, sino con la gente de su comunidad, porque allí aún viven momentos duros, de sufrimiento, entre ellos amigos y familiares.
¿SE PUEDE ENTENDER A TEBAS?
Javier Tebas, el presidente que quiere ser más empático que nadie, el rival hasta la muerte de Florentino Pérez, el enemigo de la Superliga, el que le tira "salves" a algunos por intereses y se olvida de otros, el que defiende lo de llevar partidos de La Liga a Estados Unidos, Arabia u otro país, no quiso detener el torneo, se negó a aplazar una jornada, y buscarle otra fecha.
Si tomamos en consideración las palabras de Valdano, pudiéramos decir que el presidente de La Liga quiso priorizar el fútbol por sobre todas las cosas, validar las ganancias, el dinero, por encima de los sentimientos, de la humanidad, del dolor, pero el fútbol ha llegado a un extremo que aplazar una fecha puede convertirse en un problema enorme, por lo apretado del calendario.
Creemos que en la terrible situación que estamos viviendo España, el mejor mensaje no es parar, salvo las zonas afectadas. El mejor mensaje es estar en primera línea en nuestros puestos de trabajo como todos los trabajadores del resto de sectores, dando visibilidad, generando recursos y explicando al mundo que tenemos que estar todos manos a la obra para salir adelante
Para los equipos que no juegan competiciones europeas o que no avancen en Europa Champions League, en La UEFA Europa League, o en la Conference League, es fácil encontrarle acomodo, pero sería muy difícil hacerlo con los otros, con los que siguen con vida en esas competiciones, y no son pocos, por cierto. Y tal vez por ahí se fue el razonamiento de Tebas.
¿Tiene culpa Tebas? Claro que tiene responsabilidad. Suya fue la decisión de jugar. Fue él quien decidió que La Liga no se detuviera, que los equipos se entrenaran, hicieran el viaje a otros campos. Pero la culpa no es solo del presidente, sino de un calendario atiborrado de partidos, en muchas competiciones, lo mismo de clubes que de selecciones, lo cual hace demasiado complicado encontrarle reacomodo a una jornada completa.
El fútbol, sin embargo, tiene antecedentes cercanos sobre suspensiones completas, como las acontecidas durante la pandemia del coronavirus, y al final todo se acomodó y salvo en la Ligue 1, la de Francia, todo se terminó, hubo campeones, finalistas, goleadas, grandes actuaciones. Y esta vez, solo por un fin de semana, no hubo la empatía necesaria para parar el torneo de España. Tal vez habría que recordar las palabras de Valdano y ser más empáticos la próxima vez.
