Las pasiones desmedidas nunca fueron buenas, para nada en la vida. Y mucho menos en el deporte, donde los escenarios, a veces multitudinarios, se prestan para que algunos pases por encima de las leyes de los hombres y de la cordura y la urbanidad, y salgan a relucir eso oscuro que algunas personas llevan dentro, como el fundamentalismo, el racismo o el odio.

Se veĂa venir un derby muy complejos en el Civitas Metropolitano entre el AtlĂ©tico de Madrid y el Real Madrid. Hay una rivalidad inmensa entre los dos equipos, cimentada por dĂ©cadas, por el dominio de los blancos sobre los rojiblancos, en cuanto a resultados de los partidos entre ellos, y tambiĂ©n a tĂtulos conseguidos, con una diferencia abismal favorable a los que fueron visitadores.
AdemĂĄs, en los Ășltimos años el odio se acrecentĂł. Thibaut Courtois dejĂł el Chelsea para volver a Madrid y en lugar de hacerlo en el AtlĂ©tico, donde ya habĂa estado, se fue al Real. Para la aficiĂłn rojiblanca fue un golpe duro, y mĂĄs duro resultaron las palabras del guardameta, quien dijo en algĂșn momento que estaba ene l lado bueno de la historia, en referencia a su club actual.
La gente no se enoja sola, la gente se enoja por algo... No ayudamos los protagonistas cuando subestimamos a la gente, cargamos a la gente, provocamos a la gente⊠La gente se enoja, la gente no tiene otra forma de hacerlo, de mala manera que no estå bien, pero evidentemente tenemos que buscar calma
EL FRENTE ATLĂTICO Y EL ODIO A VINICIUS
Si eso fuera poco, también comenzó la campaña de odio a Vinicius, de la cual hablamos la semana anterior. En el Atlético B comenzaron las agresiones contra el crack brasileño, y no solo por el color de su piel, sino porque el chico desembarcó en la llamada Casa Blanca tras pagar Florentino Pérez mucho dinero. Llegó con la etiqueta de jugador de futuro, y eso dolió.
Recordemos la mordida en la cabeza en su primer partido en España, el muñeco con una camiseta con su nĂșmero colgado de una autopista, los gritos de "mono" o "muĂ©rete" fuera del estadio del AtlĂ©tico en partidos anteriores, por parte del que algunos llaman el equipo del pueblo, que pierde contra cualquiera, o empata, pero que se juega la vida siempre que enfrenta al Real Madrid.

HabrĂĄ sanciones para los aficionados que lanzaron objetos a Thibaut Courtois... Lo que ocurriĂł ayer en un campo de fĂștbol de nuestro paĂs es intolerable. Es la antĂtesis de los valores deportivos. HabrĂĄ sanciones para los autores
Lo de este domingo fue bochornoso, y eso que la Liga advirtiĂł contra el uso de mĂĄscaras para entrar al campo, una estrategia lanzada por los seguidores rojiblancos con la intenciĂłn de poder entrar al campo, insultar, sin ser descubiertos. TambiĂ©n la directiva del torneo alertĂł que no permitirĂa el supuesto homenaje al Mono Burgos, en el minuto 13, porque sabĂa cuĂĄl era la intenciĂłn.
ÂżBastaron las advertencias de La Liga? No. Fueron insuficientes. El partido fue tenso y se sentĂa, se presentĂa que en cualquier momento podĂa ocurrir algo, y ocurriĂł. DetrĂĄs del arco que defendiĂł Courtois en el segundo tiempo pasaban cosas, ofendĂan al guardameta belga, y este, cuando el Madrid se adelantĂł, se volviĂł a la grada y la increpĂł. Y ahĂ estallĂł todo, porque al arquero le lanzaron cualquier tipo de objetos, sobre todo mecheros.
El ĂĄrbitro detuvo el partido, orientĂł al delegado de campo mandar un mensaje a la aficiĂłn hasta en dos ocasiones y luego mandĂł a los dos equipos a los vestidores para esperar que la situaciĂłn se calmara. Al final se terminĂł el partido, el AtlĂ©tico igualĂł casi sobre la bocina, o en el sexto minuto del tiempo añadido, pero la vergĂŒenza por lo que habĂa ocurrido no la borra nadie.

LA COMPLICIDAD DEL ENTRENADOR Y LOS JUGADORES CON LOS VIOLENTOS
Diego Pablo Simeone, el entrenador del Atlético de Madrid no fue el mås modélico de los jugadores. Si alguien tiene dudas, que haga una revisión en cualquiera de los buscadores y verå decenas de provocaciones suyas, agresiones a compañeros de profesión, y con esa mentalidad entrena a su equipo, para que vayan como espartanos a la cancha, sin tener en cuenta mucho mås.
Cuando el partido estuvo detenido, Simeone hizo gestos al Fondo AtlĂ©tico, los aficionados ultra del AtlĂ©tico para que pensaran las cosas que hacĂan, y cuando se terminĂł el partido fue hasta el lugar a agradecer a los violentos. NO solo fue Ă©l, sino todo el equipo, en tanto la otra parte de la aficiĂłn presente en el estadio le reprochaba el referido gesto al entrenador y los jugadores.

Nuestra gente decĂan que se han sentido provocados y por eso se han querido defender... pero no lo justifica, no hay que tirar cosas... OjalĂĄ que no vuelva a ocurrir... que los sancionen porque los que quedan manchados somos nosotros como AtlĂ©tico de Madrid
La directiva del AtlĂ©tico, el entrenador y los jugadores le temen al Frente AtlĂ©tico. Por esa razĂłn, Simeone intentĂł culpar a Courtois como iniciador de todo, y por eso dijo que los jugadores tienen que tener cuidado con lo que hacen, con sus gestos, con lo de encarar a la grada, como si Ă©l no lo hubiera hecho nunca. Y en la misma lĂnea se pronunciĂł el capitĂĄn Koke, otro que quedĂł en entredicho.
Lo cierto es que la imagen del Atlético de Madrid quedó por los suelos tras el partido, mås allå de que haya conseguido igualar en los minutos finales, y las declaraciones y el modo de actuar de su entrenador dice mucho de un dirigente de un equipo de primera división de una de las mejores ligas europeas y explica el comportamiento de unos y otros, aunque alguno crea que no se le puede pedir mås a un guerrero como Simeone.
Ahora el AtlĂ©tico de Madrid enfrenta un cierre de su campo. Es posible que la justicia deportiva ordene cerrar solo la parte donde estuvieron los violentos del Frente AtlĂ©tico, pero hay tanta complicidad entre la directiva, el entrenador, los jugadores y ellos que pueden hasta buscarle acomodo en otra parte de la grada. De todas formas, la vergĂŒenza se consumĂł y ahora costarĂĄ olvidarla.
