Muy pocos entrenadores pueden darse el lujo de decir que tienen su puesto seguro para la próxima temporada del fútbol en Europa. Aunque la mayoría de ellos sigan al frente de sus respectivos equipos, en situaciones que muchas veces dependen del propio técnico, a estas alturas comenzó una danza cuyos compases finales se conocerán en junio, una vez terminadas las ligas y camino a la próxima pretemporada.
Algunos clubes se han adelantado, por una causa u otra, y otros aguardan por los próximos movimientos para decidir a quién colocarán al frente del banquillo de cara a la campaña siguiente, en el inicio de un baile que ya trajo su primera gran sorpresa, con la rescisión del contrato de Julian Nagelsmann por el Bayern de Múnich y la contratación en su lugar de Thomas Tuchel.
Antes, el Sevilla español despidió a su segundo entrenador de la temporada, el argentino Jorge Sampaoli, y lo reemplazó por un veterano de los banquillos como José Luis Mendilibar. Todo eso en la última semana, pero antes, a principios de octubre, ya había finiquitado el acuerdo con Julen Lopetegui, quien enseguida consiguió trabajo en la Liga Premier inglesa, para entrenar al Wolverhampton.
LA SORPRESA DEL BAYERN CON NAGELSMANN
Julian Nagelsmann y el Bayern Múnich parecían la combinación perfecta: un entrenador que adora el juego ofensivo, joven -tal vez el más joven de la élite europea- y un club que prioriza el fútbol vertiginoso y los resultados. El club, perteneciente a la vieja realeza del fútbol europeo, parecía feliz con su adiestrador, clave en la presente edición de la UEFA Champions League.
El Bayern, con el otrora técnico del Ajax de Amsterdam en el puesto de mando, llevaba ocho victorias en otros tantos partidos de Champions, incluyendo dos ante el París St. Germain en los octavos de final de la lid continental, con los cuales cortó los sueños de ganar su primera orejona a los parisinos de Kylian Mbappé, Lionel Messi, Sergio Ramos y Neymar Junior.
Sin embargo, esta temporada el Bayern no ha estado tan dominante en la Bundesliga como en campañas anteriores, al extremo de que en su último partido, ante el Bayer de Leverkusen que entrena el español Xabi Alonso, cayó por 2-1 y cedió el liderazgo al Borussia Dortmund, que había goleado al Colonia por 6-1. La directiva del once bávaro no esperó más y finiquitó el acuerdo con su entrenador y, al mismo tiempo, anunció la llegada de Thomas Tuchel.
Tuchel arrancó la temporada con el Chelsea, pero no terminó por entenderse con los dueños, quienes quisieron imponerle a Cristiano Ronaldo, y eso terminó con su salida del club. Desde entonces, como a todos los adiestradores en paro, se le vinculó con varios clubes, incluido el Real Madrid español, al cual, según rumores, exigió una lista de fichajes, hasta que, finalmente regresó a su país.
De los grandes entrenadores están sin trabajo ahora el propio Nagelsmann, el argentino Mauricio Pochettino y el francés Zinedine Zidane, entre algunos otros con más o menos éxito desde los banquillos. Los equipos grandes sueñan con ellos, pero no siempre van a conseguir que entrenen a sus jugadores, sobre todo porque, en algún caso, tendrían que modificar su idea de fútbol, o trabajar con vestuarios demasiado enredados.
¿MADRID Y PSG CAMBIARÁN DE ENTRENADOR?
La derrota del PSG ante el Bayern en la Champions sentenció a Christophe Galtier, el hombre que contrató el PSG para poner orden en el banquillo y ganar, al fin, una UEFA Champions League. Sin embargo, la derrota en octavos de final hace que su futuro esté en el aire. Su relevo ideal, tal como lo ven en París, sería Zinedine Zidane, pero Zizou tiene escrúpulos con el equipo propiedad de Qatar.
O al menos los ha tenido hasta ahora, por dos razones fundamentales: adora al Marsella, el club de la ciudad donde nació, acérrimo rival del PSG en la Liga Francesa. Y cree que si firma por el equipo de Messi y Neymar traicionaría al Real Madrid, el equipo de sus amores, donde jugó y dirigió, y donde ganó cinco Champions, una como jugador y las otras tres desde el puesto de mando. Aunque también sumó una como segundo de Carlo Ancelotti.
Ancelotti también está en el aire. No importa que haya ganado la Champions de 2021-2022. Ya se despidió de la Liga esta temporada y suma tres derrotas seguidas ante el Barcelona. Solo se salvará si gana la Champions, pero eso suele ser una tarea muy complicada. Y aún si lo lograra, muchos lo ven en Brasil, al frente de la Pentacampeona del mundo, con la cual buscaría estar mucho más arriba de lo que ha conseguido.
El italiano es el entrenador con más Champions, y el único que ha ganado en las cinco grandes ligas europeas: Italia, Francia, Inglaterra, Alemania y España. A esa fantástica carrera le faltaría un título mundial, y él sabe que sería mucho más fácil conseguirlo en el puesto de mando de Brasil, que desde la escuadra de su país, que se ha perdido las dos últimas copas mundiales, por no poder clasificarse.
El Madrid tiene a Raúl González en la recámara, por si se va o tiene que cesar al italiano, pero no descarta a Nalgerlsmann, ni a Pochettino, aunque desde dentro del club sienten que el hombre es Xabi Alonso. Al final, nadie lo sabe, pero hasta Antonio Conte, que abandonará el Tottenham, puede ser candidato. Nada, que la danza de entrenadores ha comenzado y su ritmo puede aumentar en los próximos meses.
