La Copa Mundial de Qatar no deja de sorprender. Si en la tercera fecha fue Argentina la que dio la primera sorpresa, en la cuarta le correspondió a una Alemania tan dominante sobre el campo como inefectiva. La escuadra teutona pareció tener el partido controlado, mientras ganaba por 1-0, pero los japoneses, que apenas tuvieron la pelota, terminaron por darle la vuelta.
Los de Hansi Flick fueron incapaces de encontrar las redes del arco rival, por más que disfrutaron de una amplia posesión del balón, sobre todo en el primer tiempo, e incluso tuvieron infinidad de disparos a la portería más que los japoneses. Su único gol lo marcó Ilkay Gundogan de penal, al minuto 32, Pero de ahí en lo adelante no hubo formas de que la pelota entrara.
Japón aguardó agazapado, y cuando el seleccionador Hajime Moriyasu hizo los primeros cambios, su equipo pareció otro y en apenas unos minutos logró empatar y darle la vuelta. Ahora, tras la victoria ante los germanos, el sueño de igualar su mejores actuación histórica en copas del mundo, los octavos de final, no parece tan lejano.
¿QUÉ TIENE QUE HACER ALEMANIA PARA PASAR A OCTAVOS?
La derrota constituye un varapalo enorme para una de las grandes selecciones de la historia del fútbol, pero a Alemania le quedan dos partidos por jugar en esta fase de grupos, y depende aún de ella su clasificación o no a la siguiente fase. Con ganar en sus dos presentaciones tiene para plantarse en octavos de final, incluso para ser primera de la llave. Pero, claro, antes tiene que ganar.
El próximo rival de la selección germana será ,el 27 de noviembre, España, la otra gran favorita del Grupo E. Si la cuatro veces campeona del mundo gana, seguirá dependiendo de sus resultados y le bastaría con imponerse a Costa Rica el 1 de diciembre. Pero eso es lo que ocurriría si gana, porque una derrota o, incluso, un empate, podría dejarla fuera en fase de grupos.
Una eliminación en en primera fase equipararía su peor actuación histórica, la de Rusia 2018, donde debutó con revés de 1-0 ante México, por gol de Hirving Lozano en el Estadio Luzhniki, y aunque luego se recuperó y venció por 2-1 a Suecia, in extremis, por dianas de Marco Reus y Tony Kroos, la de este último en el minuto 95, terminó por dejar la lid tras caer ante Surcorea por 2-0.
Alemania no participó en la primera edición de la Copa Mundial, en Uruguay 1930. En la segunda, y luego de ocupar el tercer puesto en Italia 1934, se fue en la primera fase de Francia 1938 al empatar un partido y perder otro. Luego en 1950 no participó, pero desde entonces siempre estuvo, al menos en la segunda fase, con cuatro títulos y varias finales disputadas.
¿CAMBIAN LAS COSAS CON LAS DERROTAS DE ALEMANIA Y ARGENTINA EN QATAR?
Los reveses de Alemania y Argentina en sus respectivos debuts en Qatar 2022 no significan que ninguno de los dos vaya a abdicar en sus opciones de seguir más allá de la fase de grupos, pero sí cambia la percepción que se tiene sobre sus posibilidades, sobre todo porque cayeron ante rivales muy inferiores, y la afición y los analistas se preguntan qué pasará cuando tropiecen con los 'tiburones', como diría José Mourinho.
Argentina aún puede avanzar a la fase siguiente, y ser primera de grupo, incluso. Solo tendría que vencer a México y Polonia. Aunque, eso sí, su imagen quedó lastrada por la forma en que se presentó en su partido de estreno, y el juego que exhibió ante la selección saudí, que dominó los registros más importantes del juego y no permitió que Lionel Messi fuera determinante en la cancha.
Alemania, si miramos otros indicadores, más allá de los goles -que son los que deciden, claro- fue superior a los rivales, pero le faltó el acierto de los grandes ante el arco rival. En muchas oportunidades estuvo cerca del 2-0 y no lo consiguió, porque le faltó un delantero voraz, y también liderazgo. Cierto que Jamal Musiala hace cosas increíbles y juega a otro ritmo, pero si no tienes a alguien que haga goles, no vas a llegar lejos en Qatar.
Kai Havertz es un gran futbolista, pero al menos en el primer partido no fue el nueve determinante que necesita una selección que llegó a Qatar con el sueño de convertirse en pentacampeona e igualar a Brasil, y el partido contra Japón fue una muestra fehaciente. Incluso, los alemanes, mucho más altos que los japoneses, tampoco pudieron sacar provecho del juego aéreo y de las jugadas a balón parado.
Ahora le tocará luchar contra la corriente y apelar a lo mejor de su fútbol y sus tradiciones para no volver a quedar fuera en la fase de grupos de una Copa Mundial. Porque de ocurrir, entonces comenzaría a hablarse de una crisis en el más universal en el país. Y yo, al menos, me resisto a creerlo. Alemania seguirá siendo Alemania en el fútbol y aún dará que hablar en Qatar 2022. Al menos eso creo. (Aunque con Argentina no estoy tan seguro).