El Comité de Disciplina de la Federación Española de Fútbol (RFEF) decidió sancionar al Getafe con la clausura de cierta zona de su estadio durante tres partidos, la medida se tomó por los insultos racistas proferidos por algunos de sus aficionados, en la más reciente jornada de LaLiga ante el Sevilla (0:1).
En el partido mencionado se aplicó el protocolo antirracismo llegado el minuto 68'; tras los insultos que recibió el jugador argentino del Sevilla, Marcos Acuña, a quien sin más llamaron como "mono" desde la tribuna. Por su parte, el técnico del equipo andaluz Quique Sánchez Flores, lo calificaron despectivamente de "gitano".
Según confirmó la RFEF, la sanción se impone en aplicación del artículo 51.7 del Código disciplinario de la RFEF por la comisión de infracciones muy graves tipificadas en los artículos 69.1.c), 69.2.d) y 76.2, apartados b) y d).
Así las cosas, la resolución del Comité exige al Getafe identificar este mismo miércoles la parte de la tribuna que se cerrará (zona aproximada de donde se originaron los insultos), “A tal efecto, en los tres próximos encuentros a disputar por el Getafe en su campo se deberá cerrar el acceso al público en dicha zona, que quedará debidamente acotada, no pudiéndose reubicar a los espectadores que, en su caso, pudieran venir ocupando las mismas con carácter habitual”, sentenció la RFEF.
El club además deberá pagar una multa de 27.000 euros.