Esta semana trascendió que Raphael Varane, el más grande de los defensores centrales franceses del presente siglo, deja el fútbol. Es normal que un futbolista diga adiós al más universal, porque es algo que le pasa a todos. Lo que no es normal es que decida dar un paso al lado con 31 años de edad, justo cuando otros, entre ellos sus excompañeros, insisten en seguir, con casi 40 años.
Motivos muy fuertes debe tener el otrora jugador del Real Madrid y el Manchester United para dar la espalda al juego, al trabajo que lo sacó de la pobreza y la vida simple del joven desconocido, para convertirlo en un crack, en un futbolista de élite, en uno de los mejores jugadores de su tiempo, ganador de cuanto título uno pueda imaginarse y en pieza importante de clubes de primer nivel.
Claro, tampoco es para halarse los pelos, porque Varane se va a vivir la vida, a disfrutar lo que se ganó con su juego durante más de una década al primer nivel, con cuatro trofeos de Champions en sus vitrinas, todos con el Real Madrid, y con un título de Copa Mundial, además, conseguida con Francia en 1998. Así, en esa situación, cualquiera puede irse, dar un paso al lado, abdicar... porque lo ha conseguido todo.
Apuestas en el Fútbol con Bet365En mi carrera he asumido muchos desafíos, me he levantado una y otra vez. Se suponía que casi todo era imposible. Emociones increíbles, momentos especiales y recuerdos que durarán toda la vida. Reflexionando sobre estos momentos, anuncio mi retiro del juego que a todos tanto nos gusta con inmenso orgullo y sensación de realización. Me mantengo en el más alto nivel, quiero irme fuerte, no sólo aferrarme al juego. Se necesita una gran dosis de coraje para escuchar a tu corazón y a tu instinto. El deseo y las necesidades son dos cosas diferentes. Me he caído y me he levantado mil veces, y esta vez, es el momento de parar y colgar mis botas con mi último partido ganando un trofeo en Wembley.
Raphael Varane
¿POR QUÉ DECIDIÓ VARANE DEJAR EL FÚTBOL?
El ya exinternacional francés pensó seguir. Hasta hace un mes intentó poner su cuerpo a punto para jugar con el Como italiano, a las órdenes de Ces Fábregas, con quien fue rival en las canchas. Era una buena oportunidad para seguir, para volver a ser importante, luego de un tiempo en el Manchester United, donde las cosas no salieron como él hubiera querido, y tampoco como pretendió el club.
Sin embargo, se enroló con el Como. Le apetecía regresar a la alta competición con un equipo alejado de las altas pretensiones, sin la necesidad de ganar cada día, con un entrenador emergente, con ideas frescas, con el cual iba a tener protagonismo, porque iba a aportar la experiencia en el centro de la zaga, algo que era importante para Fábregas, pero solo estuvo unos minutos en la cancha.
Apuestas en el Fútbol con Bet365Me ha encantado luchar por mí mismo, mis clubes, mi país, mis compañeros de equipo y los seguidores de cada equipo en el que he jugado. De Lens a Mánchester pasando por Madrid, y jugando para nuestra selección. He defendido cada insignia con todo lo que tengo, y he amado cada minuto del viaje. El juego al más alto nivel es una experiencia emocionante. Prueba cada nivel de tu cuerpo y tu mente. Las emociones que experimentamos no las puedes encontrar en ningún otro lugar. Como atletas, nunca estamos satisfechos, nunca aceptando el éxito. Es nuestra naturaleza y lo que nos alimenta. No me arrepiento, no cambiaría nada. He ganado más de lo que podría haber soñado, pero más allá de los elogios y trofeos, estoy orgulloso de que pase lo que pase, me he aferrado a mis principios de ser sincero y he intentado irme por todas partes mejor de lo que lo encontré. Espero haberlos hecho sentir orgullosos.
Varane
En su primer partido de la temporada, como titular, solo aguantó 20 minutos en el campo. Era todo lo que necesitaba para decidir que había llegado el final. Hacía cuatro meses que no jugaba un partido oficial y solo aguantó 20 minutos. Cuando se marchó del campo, escoltado por dos fisios, ya lo tenía claro: había llegado el adiós definitivo. Sería duro, pero hay vida más allá del fútbol, pensó.
Su rodilla izquierda le estaba pasando la cuenta y ya no tenía la confianza de antaño, cuando era uno de los defensores más rápidos de Europa, capaz de ir al corte con confianza absoluta, o amedrentar con su presencia a cualquier atacante, porque sabía que con su velocidad podría frenarlo con relativa facilidad. Y si estás así, es mejor dar un paso al lado y abdicar.
Apuestas en el Fútbol con Bet365Y así, una nueva vida comienza fuera del campo. Me quedaré en el Como. Simplemente sin usar mis botas y almohadillas. Algo sobre lo que estoy deseando compartir pronto. Por ahora, a los seguidores de cada club en el que jugué, a mis compañeros de equipo, entrenadores y personal... desde el fondo de mi corazón, gracias por hacer este viaje más especial de lo que mis sueños más salvajes jamás podrían prever. Gracias, fútbol. Con amor, Raph
Raphael Varane
Entonces, preparó un comunicado, lo explicó todo, pidió perdón a sus seguidores y dijo adiós. Con él se va una época, un jugador que emparejó bien con cada zaguero que le pusieron al lado, que estuvo siempre en la sombra cuando otros se llevaban los flashes, por los goles, las voleas o las atajadas. Como todo central, su trabajo era el sucio, el no tan vistoso. Y eso también lo entendió siempre.
ZIDANE NO SE EQUIVOCÓ
Raphael Varane comenzó en el fútbol desde pequeñito. Era un chico tímido, que solo quería jugar en el jardín de su casa, sin ir más allá, pero su padre vio en él potencial y lo llevó a unas pruebas con el Lens, que pasó con solvencia y le fue también que apenas siendo adolescente ya estaba en el segundo equipo. Desde Madrid, Zinedine Zidane tenía los ojos puestos en el fútbol francés.
Trabajaba en el equipo blanco, a las órdenes de Florentino y vio a Varane. El mejor futbolista francés de la historia se dio cuenta al momento de que el defensa del Lens iba a ser un gran jugador y era lo que necesitaba el Madrid. Se lo comentó a Florentino y el presidente blanco, que le tuvo siempre toda la confianza al exjugador, le dio vía libre para que se pusiera en contacto con él.
Apuestas en el Fútbol con Bet365Estaba en bachillerato y me llamó Zizou, pero contesté sin saber muy bien quién era. Me habló y me dijo que no era una broma, que era él. Reconocí su voz al preguntar quién era, pero me dio vergüenza y fue una sorpresa le dije que si me podía llamar en otro momento porque estaba ocupado. Te imaginas muchas cosas pero nunca ir al Real Madrid. Era algo tan grande que ni pensaba en ello...Mi primer recuerdo fue del vestuario. Miraba las taquillas mientras pensaba que estos iban a ser mis compañeros ahora. Me recibieron muy bien. La ayuda de Benzema y Diarra fue importante para mí y siempre me han ayudado mucho. Con 18 años, sin conocerme, tenía que demostrar que podía compartir vestuario con ellos
Raphael Varane
Varane estudiaba para bachiller. Por su cabeza pasaba que podía dedicarse al fútbol como profesional, incluso que podría ser internacional, pero no que Zizou lo iba a llamar para ofrecerle ser jugador del Real Madrid. Ahí se disparó todo, se sintió como en una nube, las cosas comenzaron a ir a la velocidad de la luz, y en poco tiempo estaba en el Santiago Bernabeu.
Apuestas en el Fútbol con Bet365Desde que llegué en 2011, hemos superado juntos todas las expectativas y hemos logrado cosas que jamás hubiera soñado. Quisiera dar las gracias a todos los entrenadores y a todas las personas que trabajan o han trabajado en el club por todo lo que han hecho por mí . Muchísimas gracias también a todos los Madridistas que siempre me dieron mucho cariño y con su gran exigencia me empujaron a dar lo máximo y luchar por cada éxito. He tenido el honor de compartir vestuario con los mejores jugadores del mundo. Innumerables victorias que nunca olvidaré, especialmente “la Décima”. Me doy cuenta de que ha sido un gran privilegio haber podido vivir esos momentos tan especiales.
Raphael Varane en su despedida del Real Madrid
Cuando desembarcó en el vestuario blanco quedó obnubilado. No se lo creía, pero el tiempo no se detuvo. Enseguida comenzó a entrenar y a competir por un puesto. Le ganó la partida a Pepe, en tiempos de José Mourinho y formó una dupla tremenda con Sergio Ramos, la misma con la que ganó el Real Madrid cuatro veces la UEFA Champions League, tres de ellas al hilo.
En 2018 tuvo su gran año, el mejor de su carrera y el que firmaría cualquier futbolista: título de Champions y campeón en la Copa Mundial de Rusia 2018. Era más, mucho más de lo que imaginó de niño. A partir de ahí, a pesar de no tener más de 25 años, no volvió a ser el mismo, al Madrid no le fue tan bien, incluso lo vendió al United, donde estuvo hasta hace unos meses, cuando las lesiones ya no lo dejaban seguir. Lo del Como fue una historia fugaz. Y adiós