Tres de los equipos de la División Central de la Liga Americana pelearán por un boleto para la Serie de Campeonato del llamado Joven Circuito, lo cual quiere decir que cualquiera sea el resultado de los pareos, uno de ellos tendrá el derecho de pelear por ir a la Serie Mundial, contra el campeón de la Liga Nacional, aunque antes tendrán que resolver los pareos que le corresponden.
Por una de las partes del organigrama, se medirán el campeón de la División Central, los Guandians de Cleveland, y los sorprendentes Tigres de Detroit, en tanto por la otra serán rivales los Yankees de Nueva York y los Reales de Kansas City, en dos series que pueden resultar tan atractivas como parejas, y que tal vez no se resuelvan a las primeras de cambio, sino que expriman todos los partidos programados.
Yankees y Guardians quedaron libres en la primera ronda de los play off, mientras los Tigres de Detroit se quitaron de encima a los favoritos Astros de Houston, quienes llegaron de menos a más a la postemporada, y los Reaes pasaron sobre unos Orioles de Baltimore a los cuales se les olvidó batear en los dos partidos, a pesar de que jugaron en sus predios del Camden Yard.
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Brian Cashman, genrente general de los Yankees
¿GUARDIANS O TIGRES?
El equipo de Cleveland me gustaba más con el nombre de Indians que de Guardians, pero eso no tiene importancia de cara a la serie que comienza este sábado. Incluso, tampoco importa mucho lo hecho hasta ahora, si uno bateó más que el otro, o si el pitcheo estuvo más efectivo. Son cosas que quedan en el papel y que pueden poner a pensar a analistas y aficionados, pero nada más.
Lo cierto es que Los Tigres lucieron muy bien ante los Astros. Sentenciaron los dos partidos y mandaron a casa a uno de los equipos que mejor había jugado en la última parte de la temporada regular, sobre todo porque su pitcheo respondió a las mil maravillas y su bateo fue más oportuno que nunca, pero ahora llegan los Guardians, que batearon para .238 en la temporada regular y tuvieron en el dominicano José Ramírez a su principal puntal al ataque.
Ramírez se quedó a un jonrón de conseguir meterse en el grupo de seis jugadores que tienen temporadas de 40 cuadrangulares y la misma cantidad de bases robadas, y su equipo estuvo mucho mejor en el apartado ofensivo que Detroit. Su average fue más alto, pegó más batazos de vuelta completa, anotó más carreras e impulsó más y para colmo su bateadores se poncharon más de 250 veces menos.
Si fuera por el bateo, diría que van a ganar los Guardians, pero el pitcheo de los Tigres se lució. Ambas escuadras trabajaron para una efectividad de 3.61, pero los abridores de Detroit tuvieron más salidas de calidad, con diferencia, permitieron 20 jonrones menos y tuvieron mejor WHIP, además de ser los segundos en la Americana con menos boletos otorgados, algo que no deja de ser importante.
Detroit tuvo, sin embargo, a un tal Tarik Skubal al mejor pitcher de la Liga Americana, y al seguro ganador del premio Cy Young, luego de conseguir la triple corona: más ganados, más ponches y mejor efectividad. ¿Basta eso para ganar a Cleveland? Tal vez no, y para poner un ejemplo diré que los Dodgers perdieron muchas series en los tiempos en los que el Clayton Kershaw parecía invencible. Pasará Cleveland... imagino.
¿YANKEES O ROYALS?
Yankees y Royals no se ven las caras en una Serie Divisional desde hace cuatro décadas, y eso es demasiado tiempo para hacerse un idea de cómo pueden funcionar las cosas, pero sí podemos mirar los enfrentamientos entre ellos en la pasada temporada regular, en la cual los del Bronx ganaron cinco de los siete choques, que no está mal para comenzar el análisis.
Los Yankees tienen la mejor pareja de bateadores de todas las Grandes Ligas, Juan Soto y Aaron Judge. Entre ambos se quedaron a un jonrón de los 100 y remolcaron 253 carreras, sin embargo el primer abridor de Kansas Ciity será Michael Wacha, ante el cual el Juez ha tenido acción en nueve partidos, se ha parado 21 veces en el home y en 18 turnos oficiales solo le ha pegado un hit.
Los reales tienen una buena pareja de bateadores en Bobby Witt Jr. y Salvador Pérez y cuatro de sus pitchers abridores tuvieron efectividad por debajo de las cuatro carreras limpias (Seth Lugo, Cole Ragans, Michael Wacha y Brady Singer), mientras solo dos Yankees lograron lanzar por debajo de cuatro: el lesionado Néstor Cortes y Carlos Rodon, aunque el juego inaugural lo abrirá su mejor pitcher, Gerrit Cole.
Ante los Orioles, en la Serie de Comodín, el pitcheo de los Reales estuvo inmenso, pero no creo que sea tan fácil hacer lo mismo con los Yankees, en una serie más larga y ante el equipo que lideró las Grandes Ligas en cuadrangulares (237), y el tercero con más carreras impulsadas (782), y el segundo con mayor diferencia de carreras entre anotadas y recibidas, después de los Dodgers.
Eso sí, hace 44 años, cuando se enfrentaron por última vez en postemporada, en la Serie de Campeonato de la Liga Americana, Kansas City barrió en tres jugos a los Yankees. Ahora son otros tiempos, dirán unos, y los otros se preguntarán por qué no puede pasar lo mismo. Yo veo a los Yankees peleando por un puesto en la Serie Mundial ante los Guardians, pero es béisbol y no se gana desde acá, sino desde el terreno, y usted por quién apostará.