Que el mundo del fútbol es una fuente inagotable de polémicas, enredos, acusaciones, escándalos y hasta demandas, lo sabemos, pero si esas se dan un día sí y otro también y siempre aparece un motivo para que se disparen las polémicas, será porque algo anda mal, o porque las cosas se les fueron de las manos a uno o a otros. Y en España, cada semana, aparece algo nuevo sobre lo cual preocuparse.
A principios de semana, estaban en escena las tarjetas a Vinicius, un comunicado del Real Madrid contra el árbitro que trabajó en el partido ante Osasuna y la presencia ante un juez dele x vicepresidente del Comité Técnico Arbitral, José María Enriquez Negreira, para prestar declaración por los vínculos con el caso que lleva su nombre y que lo vincula con pagos por más de siete millones desde el Fútbol Club Barcelona por motivos que se investigan aún.
También hubo acusaciones a la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) por dejas escapar al atacante Brahim Díaz con Marruecos, sin haber hecho nada por impedirlo, cuando solo debía haberlo convocado, ponerlo en la cancha alguna vez y reservarse la posibilidad de contar con él en el futuro. Ese movimiento del técnico Luis de la Fuente no sentó bien en algunos medios de prensa, que se cuestionaron la actuación del seleccionador.
LA GUARDIA CIVIL TOMA LA FEDERACIÓN
Este miércoles, los que despertaron tarde lo hicieron con la noticia de que la Guardia Civil había allanado algunas viviendas de ejecutivos, o ex ejecutivos de la Federación Española, como parte de una pesquisa para esclarecer algunos negocios turbios de la entidad que rige el fútbol en el país, y de paso ejecutó algunas detenciones, mejor las del ex presidente, Luis Rubiales, quien se encuentra de vacaciones en Punta Cana.
Solo la presencia de Rubiales en República Dominicana evitó que la Guardia Civil cargara con él, todo eso unos meses después de verse forzado a renunciar por el escándalo que generó el beso que le dio en los labios a la futbolista Jeni Hermoso luego de que España hubiera conseguido el título mundial para mujeres. Por entonces, solo la presión popular y de los medios hizo que Rubiales decidiera apartarse.
La Guardia Civil busca contratos firmados en los últimos años. Y no solo está detrás de lo que ocurrió con el pacto manejado por la empresa Cosmos, de Gerard Piqué, aún siendo jugador del Barcelona, y la Federación para llevar la Supercopa de España, y que incluía jugosas comisiones, además de condicionamientos por si participaban el Barcelona y el Real Madrid, sobre todas las cosas.
Hace un par de años se filtraron los mensajes entre Rubiales y Pique, con una complicidad tremenda y las autoridades, aunque al parecer pasaron de largo, volvieron ahora sobre el tema y además de hacer registros en la sede de la RFEF, también fueron a por algunos de los que trabajaron en el lugar o aún trabajan. Todo eso en tiempo en los cuales no se ha realizado las elecciones para escoger al sustituto legal de Rubiales.
Por el momento; Pedro Rocha, quien era mano derecha de Luis Rubiales, funge como presidente temporal y es uno de los candidatos para las elecciones, con el objetivo de continuar en el puesto. A pesar de su cargo provisional, Rocha ha tomado determinaciones que no le correspondían y que han generado malestar en el entorno del fútbol, aunque sin mayores consecuencias, al menos hasta el momento.
LA FIFA ANALIZA LA SITUACIÓN Y EL MUNDIAL ESTÁ POR EL MEDIO
Mientras estas cosas ocurren con la RFEF, el organismo que rige el más universal en el mundo, la FIFA, no ha dejado de observar la situación, sobre todo porque en sus estatutos prohíbe que los gobiernos nacionales decidan sobre sus filiales en cada país. Y sí eso ocurre, al instante se le aplican sanciones, que en la mayoría de los casos llevan a la separación temporal de la entidad del organismo mundial.
Con anterioridad, cuando algún gobierno nacional, pasó por encima de esta norma, la FIFA lo invalidó para participar en torneos internacionales de selecciones, y también para ser sedes de eventos, incluso para aspirar, por lo que la situación de España podría poner en juego la organización de la Copa Mundial de 2030, que acogerá de manera conjunta con los vecinos Marruecos y Portugal.
Es cierto que aún faltan años para la Copa Mundial, pero, a pesar de que las sedes ya fueron otorgadas, en diciembre próximo se efectuará la certificación definitiva y si España está sancionada por entonces, pudiera generar dudas a la cúpula de la FIFA, que tampoco ha tenido unos años muy limpios últimamente, y para eso solo hay que mirar los rumores que se corrieron tras el otorgamiento de la Copa Mundial de 2022 a Qatar.
La designación de Qatar le costó el puesto a varios de los pesos pesados de la Institución, entre ellos el expresidente, Joseph Blatter y a varios de los presidentes, algunos de los cuales fueron condenados en sus países por corrupción y sobornos, pero el suizo Gianni Infantino, que tomó posición justo después, pretende que las cosas se hagan tal cual están escritas, por más que también haya despertado sospechas la sede de 2034, entregada casi de manera furtiva a Arabia Saudita.
Eso no es todo lo que ocurre en España, donde los clubes y la directiva del torneo profesional se acusan casi a cada semana, o los árbitros no salen de una polémica para entrar en otra. De todas maneras, es fútbol y el deporte siempre genera pasiones, encontronazos y acciones que luego de pensadas, uno se da cuenta de que pudieron ser de otra forma. Entre ellas, el accionar de la RFEF, por ejemplo.