La Liga Española, ahora Liga EA Sports, por el nombre del nuevo sponsor, arranca este fin de semana, y desde antes de que eche a andar por primera vez el balón, las mismas interrogantes de siempre empiezan a rondar por sobre los aficionados de cada uno de los clubes. ¿Ganará el Barcelona, como en la edición pasada, o recuperará el Real Madrid el trono? ¿Dará el Atlético de Madrid la sorpresa o algún otro eléctrico aparecerá de imprevisto?
Siempre sucede lo mismo. La competición española no es como la Bundesliga o la Ligue 1, en las cuales es muy poco probable que haya algún otro candidato que no sea el Bayern de Múnich o el Paris Saint-Germain, por ese orden, más allá de que en la temporada anterior el once bávaro se impuso el último día, cuando todo hacía indicar que será el Borussia Dortmund el ganador.
En España es diferente. El título, en los últimos 20 años ha sido cuestión de tres clubes: Barcelona, Real Madrid y Atlético de Madrid. Para encontrar otro ganador, hay que ir a la temporada 2003-2004, que ganó el Valencia, con el Barcelona y el Deportivo de La Coruña como escoltas. Pero desde entonces hasta acá ha llovido mucho y el equipo che está ahora mismo más cerca de los candidatos a descender que de postularse como campeón.
EL MADRID PUEDE TENER UN PLANTILLÓN
El Real Madrid terminó como escolta el año anterior. Desde antes de la Copa Mundial de Qatar 2022, el equipo comenzó a emitir señales raras y terminó por desconectarse de La Liga desde principios de año. Parecía que solo le preocupaba pelear por la Champions, y como no la ganó, la temporada le pasó la cuenta, con la copa del rey y la Supercopa de Europa como únicos títulos.
Para esta temporada, el equipo blanco se reforzó con varios jugadores, el lateral izquierdo Frank García, los atacantes Arda guler y Brahim Díaz y el mejor centrocampista joven del mercado, el inglés Jude Bellingham, y un goleador veterano, con experiencia como internacional, como Joselu, todo con la intención de sustituir a Karim Benzema, Mariano Díaz, Eden Hazard y Marco Asensio.
Nada mal los cambios, aunque con Benzema se haya ido alguien que aportaba más de 30 goles por temporada, al menos desde la 2018-2019. Con eso bastaba para pelear, pero, de pronto, se lesionó el mejor arquero del mundo y pieza principal del sistema, Thibaut Courtois, y a la directiva blanca no le queda más remedio que salir al mercado a por un guardamenta de garantías. Es un palo duro lo del belga, pero hay suficientes nombres para sustituirlo.
Lo de Karim es más complicado, pero el aficionado blanco espera que el gol lo ponga Kyliam Mbappé, quien ha sido apartado del PSG porque no quiere renovar su contrato, que expira en 2024, lo cual lo dejaría libre para negociar con otro club desde enero próximo. El capitán galo insiste en quedarse, el PSG en que renueve o que busque equipo, y el Madrid acecha... y no se sabe mucho más.
Al Madrid le da con la plantilla que tiene para ser campeón de Liga, con todo y que el Barcelona tenga a Robert Lewandowski, Ilkay Gundogan, y piense reforzarse con alguna otra estrella. Si el Madrid hace las cosas como todos esperan, saldrá campeón, levantará su trofeo número 36, y Vinicius, Rodrigo, Camavinga y Jude Bellingham se convertirán en las nuevas estrellas del más universal en España.
EL BARCELONA OTRA VEZ FAVORITO Y EL ATLÉTICO CON OPCIONES
El Barcelona, como club, está en crisis. Hasta este viernes no tenía dinero para inscribir fichajes, pero apeló a una palanca, la venta de casi un 30 por ciento de Barça Visión y consiguió el dinero necesario para poder acreditar a algunos jugadores, porque hasta el momento solo una docena tenían ficha del primer equipo. Todo eso cuando faltan menos de 48 horas para su debut.
Todo eso a pesar de que el presidente de La Liga, Javier Tebas, advirtió que al equipo catalán no se le iban a permitir más palancas, pero en España todos saben que Joan Laporta suele conseguir lo que quiere del mandamás de la competición, incluso a pesar de que él mismo haya dicho que eso de buscar ayudas extras fue solo cuestión del año anterior. Aunque por ahí están sus declaraciones, al parecer se olvidaron.
El Barcelona contrató a Gundogan, que llegó libre, y también a Iñigo Martínez, y tiene cifradas muchas esperanzas en la camada de nuevos jugadores de la cantera, pero se le fue uno de los hombres en los que más confiaba Xavi Hernández, Ousmane Dembelé. Y lo peor, se fue sin dejar una suma cuantiosa en las arcas del club. Por lo que es presumible pensar que habrá otras ventas.
Encima de eso, Laporta quiere a Neymar Junior o a Bernardo Silva. Xavi le abre las puertas al portugués, pero se las cierra al brasileño, aunque la afición se pregunta con qué dinero cuenta el club para enrolarse en un fichaje así. Aunque en Can Barça todo es posible, al menos por lo que han conseguido en los últimos años, cuando incluso con las arcas vacías y galopantes deudas, ha conseguido contratar a grandes jugadores.
Lo del Atlético de Madrid es otra cosa. Todos saben que va a competir, que dará la cara, que su entrenador apostará por su fútbol de siempre, e intentará permanecer al acecho, por si Real Madrid y Barcelona tienen un traspiés, volver a proclamarse campeón, pero eso, ahora mismo, parece poco probable, viendo las plantillas que tienen los dos grandes, a pesar de las bajas recientes.