Los beisbolistas cubanos tuvieron un arranque espectacular en la temporada de las Grandes Ligas. O casi todos menos uno, del cual se esperaba más, José Abreu. Y eso hizo que en las votaciones para participar en el All Star Game aparecieran muchos de ellos, en una suma que llegó hasta ocho, la más alta de la historia para los nacidos en uno de los países donde primero se jugó béisbol en el mundo y donde tuvo y tiene una gran tradición.
La racha victoriosa de los Rays de Tampa Bay estuvo sostenida por el gran inicio del primera base Yandy Díaz y el jardinero Randy Arozarena, dos que se ganaron su derecho a estar en el T-Mobile Park de la ciudad de Seattle, el venidero lunes. Lo mismo pasa con el andar de los Rangers de Texas, que han tenido un pilar en el patrullero derecho Adolis García, máximo remolcador, hasta el momento, de las Grandes Ligas.
También se ganó su cupo a batazo limpio el jardinero central de los Medias Blancas de Chicago Luis Robert Junior, aunque su equipo anda muy lejos de lo que la afición y los dueños pretenden. Incluso, Robert Junior podría ser una opción de venta, una vez descartada la inclusión en la postemporada de su equipo, podría ser una opción de venta para pensar en un futuro. Y si eso ocurre, pretendientes no le faltarían al cubano.
TITULARIDAD A BATAZOS
Los cubanos se ganaron la elección a base de batazos. Incluso, varios de ellos saldrán como titulares, como los mencionados Yandy Díaz y Arozarena, cuyo peso en el juego de los Rays es tan importante que cuando no aportan con el bate, el equipo suele perder. Para poner un ejemplo, Arozarena estuvo silenciado en los últimos tres juegos ante los Phillies de Filadelfia y Tampa cedió en los tres partidos, a pesar de jugar en casa.
Hasta la fecha, en 75 juegos, Díaz batea para .310, con 12 cuadrangulares, 39 impulsadas y 56 anotadas, además de un OPS de .896, lo cual le garantizó estar en la alineación titular de la Liga Americana en Seattle. Y en la inicial sobran los sluggers y los buenos bateadores en las Grandes Ligas, una razón de mucho peso para pensar en lo determinante que ha sido.
En la Americana, Robert Junior y Adolis García aparecen como suplentes en los jardines, pero la baja por lesión de tres de los mejores bateadores del juego, Aaron Judge, Mike Trout y Yordan Álvarez, podrían darle oportunidades de iniciar el partido, en espera de las decisiones finales de los respectivos managers, pero sin descartar que tienen opciones, todo lo contrario a la Liga Nacional, donde no habrá ninguno nacido en la mayor isla del Caribe.
En el llamado Viejo Circuito hay dos suplentes en los jardines, Jorge Soler y Lourdes Gurriel Junior. El primero ha tenido una buena temporada, ha sido puntal de unos Marlins que pujan por meterse en la postemporada, y el segundo se benefició más por cierta popularidad que trajo desde Toronto, donde jugó la temporada anterior, algo que no solo lo ayudó a él sino a los jugadores de los Azulejos, quienes sin grandes actuaciones consiguieron muchos votos.
Para Cuba, ocho hombres en el Juego de Estrellas es la cifra más alta de la historia, superior en dos a los que participaron en la versión de 1968, cuando seis jugadores se enrolaron en un partido de ese tipo. A los ya mencionados esta vez, se une el lanzador derecho de los Orioles de Baltimore, Yennier Cano, que ha tenido sólidas actuaciones como acomodador con su club, y uno de los motivos del buen andar del club en esta primera parte de la campaña.
MUCHOSA LATINOS UNA VEZ MÁS
Las nóminas de los equipos de ambas ligas, incluyendo a los suplentes, están repletos de jugadores latinos, incluso algún asiático, como el caso del fenomenal japonés Shohei Ohtani, la gran sensación de los Angelinos de Los Ángeles, por su habilidad para batear y para lanzar. Ahora mismo encabeza la Americana en cuadrangulares, con 31, en tanto marcha tercero en ponches propinados, entre los serpentineros, con 132, a 24 de Kevin Gausman, con 146.
Mientras en la Liga Americana abrirán Yandy Díaz y Arozarena, por la Nacional lo harán ellos venezolano Luis Arráez (Miami Marlins), y Orlando Arcia y Ronald Acuña (Bravos de Atlanta), así como Nolan Arenado (Cardenales de San Luis) y J.D. Martínez (Los Dodgers de Los Ángeles), ambos estadounidenses, pero de padres cubanos. Todos los mencionados, entre los que estarán en la novena inicial.
Entre los reservas de la Nacional, además de Gurriel Junior y Soler, aparecen el dominicano Juan Soto (Padres de San Diego), Nick Castellanos (Phillies de Filadelfia), también de padres cubanos, y Elías Díaz, un venezolano que defiende los Rockies de Colorado como receptor. También los lanzadores Alexis Díaz (Rojos de Cincinnati) de Puerto Rico, y Camilo Doval, dominicano de los Gigantes de San Francisco.
Entre los reservas de la Americana aparecen, además de Robert Junior, Yordan Álvarez y Adlis García, el cátcher venezolano Salvador Pérez (Royals de Kansas City), el inicialista dominicano Vladimir Guerrero (Azulejos de Toronto), sus compatriota Wander Franco (Rays de Tampa), José Ramírez (Guardians de Cleveland), y el jardinero boricua Julio Rodríguez, de los anfitriones Marineros de Seattle.
Además de Cano, hay varios lanzadores latinos en la nómina de la Nacional: Luis Castillo (Dominicana-Seattle), Framber Valdés (Dominicana-Astros de Houston), Enmanuel Clase (Dominicana-Guardians de Cleveland) y Félix Bautista (Dominicana-Orioles de Baltimore).