Devin Haney vs Regis Prograis pronóstico: La principal esperanza de Prograis es ir por el nocaut

El 9 de diciembre, se llevará a cabo la pelea por el título de peso welter del WBC en San Francisco. El ring será compartido por Devin Haney y Regis Prograis.

Regis Prograis es el actual campeón de peso welter del WBC, y Devin Haney es un boxeador invicto y ya ex campeón de peso ligero. Según las cuotas de las casas de apuestas, Haney es el favorito. 

Haney aún no tiene derrotas y de repente se sintió apretado dentro de la división de peso ligero. Su carrera es típica de un campeón: habiendo obtenido un récord impresionante, no se salvó frente a los grandes nombres.

El primer rival serio para Devin fue Zaur Abdullaev, a quien el estadounidense noqueó en el cuarto asalto. Luego vinieron varias victorias de turno y, finalmente, el tan esperado encuentro con George Kambosos, como resultado del cual se convirtió en campeón absoluto, y solo consolidó su estatus en la revancha.

Pero la última pelea de Haney suscita dudas tanto de los expertos como de los aficionados: los jueces le dieron la victoria en la pelea con Vasily Lomachenko, lo que, de hecho, es una verdadera locura.

Haney no se quedará mucho tiempo en esta división, sus planes son mucho más globales y la pelea con Prograis, según sus propias palabras, es solo el primer paso.

"Es un campeón mundial, pero siento que estoy en un nivel diferente, estoy unos niveles por encima de él, y sólo necesito demostrarlo. Muéstrale a él, a su equipo, muéstrale al mundo entero, y lo haré". "Para mí es un oponente más, un nombre más en mi currículum, y lo demostraré. No es ningún secreto que tiene buena pegada, es feroz y resistente. Pero el 9 de diciembre les mostraré lo malo que es en lo que le falta."

Devin Haney

Progreis tuvo una carrera amateur bastante exitosa (94 peleas, 87 victorias), y en la categoría profesional solo perdió una pelea: en 2019 ante Josh Taylor por decisión mayoritaria de los jueces. En esa pelea perdió dos títulos (IBF y WBA), que había logrado ganar en ese momento, pero el año pasado se convirtió en campeón del WBC y logró defender el título una vez.

En su última pelea ganó por decisión dividida ante Danielito Zorrilla.

La transición a una división más pesada, en teoría, no debería causar ningún problema especial a Devin Haney: su escuela de boxeo de alta calidad y sus datos antropométricos dan todas las razones para creer que se sentirá bastante cómodo aquí.

Regis Prograis tendrá poco de su lado en esta confrontación: experiencia, categoría de peso nativa, capacidad para aguantar un golpe y habilidades de nocaut. ¿Es esto suficiente para ganar? Para ser honesto, casi nadie lo cree.

El avance de la oposición aún no ha alcanzado ese nivel y tendrá que esforzarse mucho para destruir la impecable defensa de Haney. La principal esperanza de Regis es, por supuesto, un golpe de gracia, pero Devin estará listo para esto y simplemente lo superará a expensas de la escuela, la velocidad y el tiempo. El propio Haney tampoco perseguirá una victoria temprana (nunca lo hace), sino que tomará la pelea con prudencia, economía y sin riesgos mediante una decisión de jueces, disparando casualmente a su oponente.

Nuestro pronóstico: Haney ganará con una cuota de 1,25.